La pandemia del COVID-19 ha creado un clima de incertidumbre para toda la comunidad universitaria en América Latina. Estudiantes, profesorado, y el personal administrativo son los principales afectados por la suspensión de las actividades presenciales en las universidades. Todos ellos no solo se enfrentan a cambios inesperados y drásticos en sus actividades diarias sino también experimentan gran incertidumbre sobre la continuidad de sus estudios y trabajos. El objetivo del presente boletín es entregar a nuestros lectores y lectoras recursos para pensar la situación de las universidades en América Latina y el Caribe durante la pandemia. Este boletín se complementa con algunas sugerencias que ayuden a la comunidad universitaria a navegar esta crisis y adaptarse a los escenarios futuros.
Hace pocos días, el Instituto Internacional de la UNESCO para la Educación Superior en América Latina y el Caribe, IESALC presento el informe titulado “COVID-19 y la educación superior: De los efectos inmediatos al día después”. Este documento es hasta ahora uno de los análisis más completos que he leído sobre los efectos de la pandemia en la educación superior de la región. En el documento encontrarán un análisis de los impactos que considera el contexto específico de cada país, así como un análisis con relación al resto del mundo.
La sección de estrategias que el informe presenta me pareció interesante porque presenta soluciones bastante pragmáticas. Aunque el rol del Estado con políticas públicas que apoyen a las universidades es clave, las estrategias de este documento subraya estrategias que podrían llevarse a cabo mediante los recursos con loq que cuenten actualmente las universidades.
Desde mi experiencia como estudiante y docente en Ecuador, y ahora como estudiante de doctorado en Canadá, me gustaría resaltar 5 de las estrategias mencionadas en este documento. Las he resaltado porque personalmente las he utilizado y han funcionado en mis roles como docente y estudiante.
Cambiar el enfoque pedagógico de un modelo centrado en el docente a un modelo centrado en el estudiante. De acuerdo con este informe, la crisis actual ha mostrado que un modelo de educación centrado en el conocimiento del docente y donde los estudiantes son consumidores pasivos de este conocimiento ha sido la principal barrera para que los estudiantes puedan seguir el contenido de sus cursos en un ambiente virtual. Por este motivo se recomiendan enfoques pedagógicos que brinden a los estudiantes herramientas para avanzar los contenidos de una manera más autónoma y activa.
Aprender desde el teléfono celular. En las páginas 19 y 20 de este documento se argumenta que el acceso por dispositivos móviles a las plataformas de aprendizaje online sería mucho más eficaz que el acceso por un computador ya que el porcentaje de conectividad por dispositivos móviles es mayor que la conectividad a través de un computador. Esta tendencia sugiere que las universidades deberían innovar sus programas mediante el desarrollo de soluciones tecnológicas y contenidos para su uso en dispositivos móviles.
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Investigación y desarrollo para navegar escenarios inciertos. La pandemia del COVID-19 ha demostrado la importancia de invertir en investigación a nivel nacional y regional. En la página 40 este documento argumenta que los escenarios post-COVID requieren de investigación en varias ramas de la Ciencia (e.g., educación, agricultura, medicina).
Alianzas con investigadores y centros de investigación a nivel internacional. Aunque la pandemia nos ha separado físicamente, la necesidad de superar esta crisis ha generado una demanda en la conectividad entre investigadores de todo el mundo. Antes, estos encuentros se limitaban a eventos científicos, muchas veces inaccesibles para los y las investigadores del Sur Global, hoy en día, estos eventos son mas accesibles mediante las plataformas virtuales. Por ejemplo, Clarissa Ríos Rojas recomienda a los docentes que aprovechen la conectividad online para invitar a científicos a que den una charla como parte de su clase virtual. Ella nos cuenta que hace pocos días fue invitada a una clase para presentar su trabajo con estudiantes de máster en la Universidad de Copenhague (https://www.instagram.com/p/CACvF1_j06s/).
Considero que la necesidad por innovación en la educación superior de nuestra región puede ser una oportunidad para reconectar a los y las científicos de América Latina y el Caribe que se encuentran estudiando o trabajando fuera de la región. El idioma es una de las grandes barreras que las universidades de la región tienen para conectarse con expertos y centros internacionales. Es aquí donde los científicos del Sur Global que están en el Norte Global pueden ser el puente para conectar estas realidades. En este contexto, Ekpa’palek y su grupo de mentores pueden contribuir en estas alianzas.
Quiero cerrar este boletín invitando a quienes hacen la comunidad universitaria a tratar de mirar la pandemia como una oportunidad para abandonar modelos de pensamiento que nos educan para evitar y resistir el cambio. El mundo actual requiere un pensamiento crítico e innovador. Pueden fortalecer este modo de pensamiento a través de lecturas críticas como las que nos entrega Yuval Noah Harari, o los pensadores de la región a traves de CLACSO. Personalmente, un curso que me sirve bastante en estos tiempos complejos es Design Thinking for Innovation que es gratuito y accesible por la plataforma Coursera. La clave es preparar a nuestra mente para reinventarnos, adaptarnos, pero sin cambiar nuestra esencia.
Gracias por leer y compartir.
Autora: Veronica Santafe, mentora en Ekpa’palek.